La consigna - 16º entrada

 Domingo. 20 hs. 

Me siento muy débil todavía pero me dijeron que en cuanto haga efecto el medicamento que me pusieron en el suero voy a poder incorporarme y escribir. Sé que me quedan pocas horas para la entrega. 

Mamá está conversando afuera de la habitación con Fabián. 

No entiendo muy bien qué hago en este hospital pero me aseguraron que hay wi-fi para enviar la consigna. 

El profesor se va a quedar de una pieza cuando lea mi historia y mis compañeros van a tener que reconocer que supero las expectativas y que los supero a ellos de paso, como pasa siempre con Clarita. 

Lo único que espero es que mamá no sepa que la entrega cierra en dos horas. 

Fabián me sonríe desde la ventana y creo que me guiñó el ojo. Es su forma de decirme que no le va a contar nada a mamá. Ahora sé que puedo dedicarme a la consigna sin presiones. 

El indio milenario va a cuidar a tres mascotas a las que quisieron asesinar en una reserva natural. Me sorprendo a mí misma por este argumento. Me interesa la historia, me seduce el ambiente exótico. Era una consigna difícil. 

Se ve que la medicación no es lo suficientemente rápida porque me parece que ya pasaron casi dos horas. 

Siento el terror apareciendo de nuevo en lo hondo de mis entrañas y me cuesta respirar. Creo que sufro de una forma extraña. Mis lágrimas lo dicen con silencio. 

¿Fabián dónde estará? Menos mal que no lo veo por acá sino se angustiaría mucho de verme llorar. Pero me falta el aire. Siempre se angustia cuando me ve así. 

La consigna. No la olvido. 

Creo que es inútil pensar en ella. 

Sólo me quedan quince minutos para la entrega. 

Quizás el protagonista sea un profesor que se enamoró dieciocho veces de cada una de sus alumnas y que no las recuerda porque las mató a excepción de las últimas tres a quienes puso a prueba con una consigna de escritura que las volverá locas. Voy a redactar este argumento. 

Cinco minutos. 

Vuelve la enfermera, me cambia el suero y me pone la máscara de oxígeno. Por suerte el wi-fi funciona, me asegura.